Seguimos con el corazón lleno después de la maravillosa gala benéfica que vivimos el jueves en el Teatro López de Ayala. Un encuentro que nos recordó todo lo que hemos construido juntos y lo lejos que hemos llegado desde aquellos humildes comienzos impulsados por la constancia y el coraje de Román, nuestro presidente.
No existen palabras que puedan abarcar tanta emoción y gratitud. APNABA es el reflejo del esfuerzo de muchas personas que han creído, que han apoyado y que siguen trabajando por mejorar la vida de las personas con autismo y sus familias.
Nuestro más profundo agradecimiento a quienes nos acompañasteis: familias, profesionales, autoridades, usuarios y amigos. Gracias por vuestra presencia, vuestro cariño y vuestra energía.
También un agradecimiento muy especial a los artistas invitados, que llenaron el escenario de arte, sensibilidad y magia.
Este camino está hecho de personas, de compromiso, de constancia y de amor.
Gracias por seguir caminando a nuestro lado.
Hoy, gracias a vosotros, APNABA no es solo una asociación, sino un refugio donde cada mirada encuentra comprensión y cada familia, el apoyo que necesita para seguir adelante.
